jueves, 11 de enero de 2007

Exijo excusas convincentes y un carnet por puntos para políticos

Entre las múltiples habilidades que uno ha de adquirir a lo largo de la vida para pasearse, más o menos airosamente, por este valle de lágrimas está la de aprender a ofrecer excusas convincentes. De sobra es sabido lo de que uno no ha de ser sólo honrado, sino que, además, tiene que parecerlo.
Las excusas sirven tanto para dar explicaciones o justificiaciones a cerca de un hecho o conducta como para encubrir una mentira. Desde luego, líbreme Dios de decir que invito a la adquisición de esta habilidad con el objetivo de que pasen desapercibidos los pequeños o grandes engaños de cada uno. Sin embargo, creo que es necesario disponer de esta herramienta como útil recurso, por lo que pueda pasar.
En cuanto aprendemos a hablar ya estamos con el conocido "es que, yo no quería pero resulta que otro niño me ha dicho que..." En los niños resulta gracioso ver cómo improvisan sus disculpas y cómo fabulan historias para alejar de ellos quizá el castigo que se merecen por una mala acción. En los adultos, sin embargo, cuando una excusa levanta sospechas, adquiriendo tintes de presunta mentira, la cosa no hace gracia alguna.
Todo esto viene a cuento por el hecho de que si hay a alguien a quien se le presupone ser todo un experto en excusas es a un político y, sin embargo, no hay más que escuchar las palabras de algunos destacados líderes de partidos de nuestro país para darse cuenta de que no aprendieron excesivamente bien esa técnica tan básica y tan fundamental para cualquiera y, especialmente, para los de su profesión.
En estos días, las explicaciones de nuestros líderes y dirigentes sobre por qué van y, sobre todo, por qué dejan de ir a las manifestaciones por la paz y contra el terrorismo que se celebrarán el sábado en Madrid y en Bilbao, carecen de verosimilitud. No son creíbles, huelen a interés partidista.
Señores, mal está que aparezcan desunidos ante la sociedad, pero incluso resulta más escandaloso que no argumenten de manera más elaborada sus porqués, pues parece ser que crean que serán consumidos por cortos de entendederas y la sociedad se la cobra a quienes la toman por tonta.
¡Carnet por puntos para líderes políticos ya y unión para responder al terrorismo!
PD: Está claro que yo no soy nadie realmente para exigir nada. Al menos, no soy nadie para que me hagan caso. Pero el señor Alcaraz (AVT) tampoco es realmente nadie y se permite leer manifiestos en la madrileña Puerta del Sol

El PSE no acudirá a la manifestación de Ibarretxe si no se cambia el lema porque ahora asistirá Batasuna I El PP no asistirá a la manifestación de Madrid porque el lema genera confusión I La AVT se queda fuera porque dice que la convocatoria es partidista