martes, 29 de enero de 2008

Irán trata de amordazar a sus mujeres

En 2009 habrá elecciones presidenciales en Irán y el elegido para dirigir el país será un hombre. El texto constitucional iraní dice que el sillón presidencial ha de ser ocupado por un 'rejal' y el régimen de los ayatolás considera que este término es sinónimo de 'hombres', según su significado árabe. Así pues, no hay discusión posible: las mujeres no pueden ser presidentas del país.
Sin embargo, 'rejal' también quiere decir 'personas destacadas', según el significado que tiene para los persas esta palabreja. Así pues, sí que habría discusión posible.
Obviamente, las interesadas en que se discuta y debata sobre el asunto no son otras que las mujeres iraníes.
Esto lo contaba muy bien la escritora iraní, afincada en España, Nazanín Amirian, en un artículo publicado en la revista Política Exterior.
La periodista Shahla Sherkat es una de la voces que más está luchando para que se aborde y se acabe con esta discriminación, entre otras muchas. Las feministas no sólo desean que se adopte la acepción persa de 'rejal' sino que piden que, directamente, se elimine de la Carta Magna iraní el dichoso término, para evitar de una vez por todas confusiones.
Sherkat es un grano en el culo para las autoridades iraníes, además de ser la editora de la revista mensual 'Zanan', la voz de las mujeres en Irán.
Será por todo esto y por mucho más que el gobierno de Ahmadineyad acaba de suspender esta publicación que, con una tirada de 40.000 ejemplares, ha tratado desde 1992 todo tipo de temas en favor de la reforma de aquellas normas que debilitan la identidad de la mujer y vulneran sus derechos (además de haberse atrevido a hablar de temas como sexo, divorcio o violaciones)
Duro golpe, sin lugar a dudas, para la lucha por las libertades de las iraníes este puñetazo censurable de censura.
Sin embargo, el intento del Ejecutivo de Teherán de amordazar a sus mujeres se va a quedar tan sólo en eso, en un querer y no poder.

Hoy, el más difícil todavía de las feministas iraníes tiene el soporte de una sólida Red para evitar tragedia alguna tras una caída.
Miles de mujeres se han unido a unas 300 webs de distintos grupos femenistas para potenciar la participación política de las mujeres en Irán. La nobel Shirin Ebadi, otra de las líderes feministas del país, tiene fe en internet y la considera la "única herramienta posible para las voces críticas".
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