miércoles, 21 de noviembre de 2007

Zapatero, monarca ilustrado a costa nuestra

'Todo para el pueblo pero sin el pueblo'. La vieja máxima del despotismo ilustrado pervive en las sociedades democráticas del siglo XXI. Que Zapatero decida de manera unilateral adquirir 30.000 copias del documental contra el cambio climático producido por el multipremiado Al Gore es buena prueba de ello.
El presidente del Gobierno se comprometió con el activista más mediático de cuantos batallan contra el calentamiento global que su película, 'Una verdad incómoda', estaría disponible en todos los centros escolares españoles durante el presente curso.
"El cambio climático es el reto más importante de la humanidad", anunció el presidente mientras hacía público que acababa de empeñar su palabra durante una reunión en la que olvidó, entre otras cosas, que son las Comunidades Autónomas las que, teniendo transferidas las competencias en Educación, son las que deciden sobre el material educativo que llega a cada uno de sus centros.
No sé si alguien, a toro pasado, se atrevió a comentarle a Zapatero este lapsus en materia de competencias. En cualquier caso, ya era tarde para dar marcha atrás.
Lo siguiente fue poner sobre la mesa un máximo de 580.000 euros para adquirir y distribuir el DVD y encargarle el 'marrón' al ministerio de Medio Ambiente, cuyos responsables -a través de la Fundación de la Biodiversidad- aún se encuentran enfangados en complacer al presidente.
Los de Paramount Pictures, distribuidora de la cinta de Al Gore en España fueron los tipos más felices del mundo aquel día en que a Zapatero se le ocurrió disfrazarse de Carlos III.
Si el presidente se había comprometido a hacer llegar a todos los escolares de España, de entre 13 y 17 años, 'Una verdad incómoda', significaba que ellos se iban a forrar.
Si alguien ordena sí o sí comprar algo y el dueño de ese algo lo posee en exclusiva significa que puede pedir el precio que le dé la gana por él. No se puede explicar de otra forma los muy elevados 19,3 euros de precio estimado que tendrá cada copia del filme si es que finalmente se encargan 30.000 unidades del mismo.
El dinero, más cuando es público, no es problema, pero ¿qué pasará si las Comunidades Autónomas no se interesan por distribuir entre sus centros escolares el documental de Gore ni aún obteniéndolo gratis? Las distintas consejerías de Educación ya tienen su propio material para concienciar sobre el problema del cambio climático.
Medio Ambiente está a la espera de que desde las Autonomías les lleguen las peticiones de copias.
El cumplimiento del compromiso de Zapatero con Gore no depende de una cuestión de dinero sino de voluntades.
A este paso veo a los responsables de cumplir las órdenes del monarca ilustrado Zapatero rogando a los distintos consejeros de Educación de España que, por favor, soliciten DVD's de la película aunque sea para utilizarlos después como posavasos o como adornos en el árbol de Navidad.
Conforme se acerca final de año, fecha tope dada para que la película esté en los centros educativos, el nerviosismo entre los encargados de sacar adelante esta misión va en aumento. Nadie quiere hablar sobre el asunto.
Ya llegará la hora, cuando realmente se cierre la compra de películas con Paramount, de que salgan a la luz esas cifras que hoy se nos niegan desde la Fundación de Biodiversidad del Ministerio de Medio Ambiente o desde la misma distribuidora...
Hay cosas que están mal hechas, aunque se tenga buena intención.

miércoles, 14 de noviembre de 2007

'Sube-ramitos', niños en los cementerios

Para algunos niños los cementerios no son lugares que den miedo, sino que son su lugar de trabajo. La realidad de su día a día es lo que debe asustarles, obligados como están a conseguir algo de dinero.
Los 'sube-ramitos' son muy populares en los camposantos de numerosas ciudades latinoamericanas. Que hay que dejar flores en el nicho del familiar correspondiente, situado en una inalcanzable quinta planta, allá que va un niño con una escalera y cumple con el cometido.
Ico, Perú...

Ir de aquí para allá escalera en ristre no es lo único que pueden hacer los niños en las ciudades de los muertos. También ponen agua, limpian y abrillantan lápidas, lustran zapatos, cuidan y lavan coches, rezan por las almas de los difuntos y ayudan a vender flores, refrescos y cualquier otro tipo de cosas.
El no va más de los empleos que pueden desempeñar en estos lugares es el de guía turístico. Para este cometido han de prepararse a conciencia puesto que se trata de acompañar a quienes deseen buscar las tumbas de los ilustres del lugar y una vez ante ellas contar las andanzas de sus moradores, las cuales se conocen al dedillo.

Omar Hurtado es un niño que se gana la vida en el cementerio de Sucre, Bolivia: "Tengo 13 años. Trabajo como guía desde hace cuatro años. En mi familia somos ocho. Cada día gano entre 5 y 10 bolivianos. Con el dinero que gano me doy mis gustos. Compro comida y también ayudo a mis padres. Estudio en el colegio Cardenal Maurer (en el turno de la mañana), estoy en octavo curso. Los niños guías del cementerio debemos ser 30, todos somos varones, fuera de ello existen los niños-escaleras, que deben ser 70. Los días que más trabajo tenemos son los sábados y domingos. Los que nos contratan son especialmente los turistas nacionales y extranjeros". Así hablaba para un periódico local.
También en Bolivia, en la ciudad de Cochabamba, unos 250 menores se ganan la vida entre los muertos. Hartos de malos tratos y de estar mal pagados, ni cortos ni perezosos exigieron respeto para la labor que desempeñan y un justo precio para lo que hacen. Gracias a sus reivindicaciones han conseguido que el ayuntamiento cochabambino les proporcione una acreditación por la que se les reconoce como trabajadores y que esperan les ayude para conseguir lo que querían.
Con dibujos realizados por algunos de estos niños, unos holandeses han realizado el siguiente vídeo...


jueves, 8 de noviembre de 2007

El ABC de la mentira

La mentira con la que abría hoy su edición en papel el triste y rancio diario conservador ABC aparece en su web como la noticia (ficticia, añado yo) más leída del día. A las cosas hay que llamarlas por su nombre y hoy ABC ha decidido mentir a sus lectores de manera descarada, a todo trapo, haciendo gala de un amarillismo impropio, anteponiendo las ventas y los clicks a la verdad, tras el siguiente titular: 'Miles de gitanos rumanos amenazados de expulsión en Italia inician su éxodo a España'.
El tema, confeccionado en Roma y en Castellón, huele a encargo editorial del que manda en el periódico. Es frecuente que a un periodista le caiga un trabajo de esta calaña y es normal que el asalariado que todos llevamos dentro cumpla con lo que se le pide. Ahora, existe el derecho a no firmar la información que viene impuesta desde arriba. La patraña de ABC, en cambio, sí se ha publicado con el nombre y apellidos de sus autores (...que Dios perdone sus pecados)
El caso es que ABC tira del hilo del decreto de expulsión aprobado en Italia, mediante el que ciudadanos comunitarios pueden ser deportados del país por cuestiones de seguridad y que está afectando, casi exclusivamente, a la comunidad rumana residente en el país transalpino, para hacernos creer que vamos a ser invadidos por el ejército de rumanos, y más concretamente de gitanos rumanos, que huirán de Italia acosados por las leyes y la presión ejercida por partidos ultraconservadores y ciertos actos de violencia racista.
Pues bien, ni va a ver invasión, ni expulsión masiva de nadie en Italia, ni nada de nada. '¡Tós quietos, paraos!' que aquí la única alarma que debería saltar es la de la vergüenza de quien miente a sus lectores.
La información populista, alarmista y retorcida del diario es inaceptable se mire por donde se mire, si bien su parte de irresponsabilidad es la que a mí más me preocupa. Irresponsabilidad en cuanto a que este tipo de escritos fomentan el odio y la xenofobia y ya se sabe lo de la siembra de vientos y la recogida de tempestades ésa.
Y si digo que en el artículo mienten no es sólo porque no aporten ni un sólo dato fiable, que no existe, sino que después de hablar con la fuente a la que ellos se agarran principalmente para construir su invención -además de con alguna que otra más y de consultar con mi sentido común- he constatado la tergiversación de las palabras de la misma que han realizado.
Ángela Placsintar, rumana, presidenta de la Asociación de Inmigrantes del Este, acababa la conversación telefónica que hoy he mantenido con ella pidiéndome por favor que deje bien clarito que ella no ha dicho lo que en ABC dicen que ha dicho.
España no es jauja ni para los inmigrantes rumanos ni para los de ninguna otra parte del mundo y el país no va a ser invadido por nada ni por nadie, a no ser que se cumplan las predicciones de Greenpeace como consecuencia del cambio climático.

Para leer la mentira de ABC, pinchar aquí>>
Para leer algo más real, mejor ADN>>

miércoles, 7 de noviembre de 2007

Arzobispo anti-homofobia

No es frecuente leer que todo un arzobispo dice cosas como la siguiente: "Yo me imagino a Dios llorando al ver que su Iglesia se permite perder el tiempo condenando a los gays y las lesbianas, mientras medio mundo pasa hambre y el sida arrasa".
No, no es broma. Es parte de la entrevista de contraportada que publica hoy El País. Sin embargo, he de confesar que hay algo de trampa en lo que expongo. Para empezar, la cita no corresponde a algo que haya dicho un jerifalte eclesial español.
El tipo abunda en el tema con guindas como la siguiente: "¿Qué diablos pasa con las iglesias?¿Cómo es posible luchar contra el racismo y no contra la homofobia? La orientación sexual no se elige. La homofobia es también una forma de apartheid. Los negros no elegimos ser negros; los homosexuales, tampoco".
Si a lo de que el autor de las citas anteriores no es español añado el hecho de que tampoco es católico-apostólico-romano, supongo que la sorpresa ante lo manifestado decrece.
Como en cualquier trama, la cosa pierde su gracia a medida que se van desvelando los misterios que la sustentan.
El surafricano Desmond Tutu, arzobispo anglicano y Nobel de la Paz en 1984, es el hombre de Dios que habla de esta manera... pueden ustedes soltar ahora sus más que comprensibles "¡Ah, claro!", "Ya decía yo...", "Eso no vale", "Rouco iba a ser, sí, los cojo..es", etc, etc...