viernes, 20 de julio de 2007

PP: objetivo, recuperar el poder

El PP tiene muy clara una cosa: quiere recuperar el poder sea como sea.
"Si en campo abierto hemos sido claramente derrotados una y otra vez, quizá sea hora de poner en marcha una guerra de guerrillas", han debido de pensar Rajoy y la Dirección General de su partido. "No más intentos de desgaste político del líder rival nacional con los temas de siempre, la estrategia para lograr la victoria pasa ahora por arañar votos en aquellos lugares donde los perdimos con planes para debilitar a los líderes rivales locales", imagino que habrán maquinado las cabezas pensantes de Génova. "Unos cuantos escaños más en Andalucía, subimos en Baleares, nos espabilamos de una puñetera vez en Cataluña y ya está, nos salen las cuentas, ¡Mariano presidente!".
Los hilos se mueven desde Madrid, donde el "núcleo duro" del partido ordena y manda con el beneplácito de Rajoy, no cabe otra suposición.
Sin embargo, la primera víctima política de esta confabulación popular por la victoria ha sido alguien de su propio partido, el hasta hoy presidente de los populares catalanes, Josep Piqué. Éste ha dimitido de su cargo y ha anunciado su retirada de la política en una carta en la que habla de "mezquindades y miserias" en el partido y donde acusa a la Dirección del PP de tratar de demoler su imagen ante la sociedad catalana.
Piqué, alabado por sus rivales políticos, se marcha llamando en público amigo a Rajoy y 'perros' -sospecho yo-, en silencio, a más de un Acebes y de un Zaplana.